¡ V a c a c i o n e s !
Paro por tiempo indefinido.
Viajes, risas, fiestas, abrazos, noches, calor, filosofía, hielo, luz, aprendizaje, besos, melodías.
Un gusto conocerte, 2010. Gracias.
Ya te quiero ver acá, mi feliz año nuevo...
En este piano bar, la sal no sala y sólo Dios sabe. No quiero filosofía barata y zapatos de goma, estoy buscando un símbolo de paz. Voy demoliendo hoteles, es parte de la religión: El karma de vivir al sur. No me verás en el subte, no voy en tren, recorro la vereda del Sol de esta ruta perdedora. Estaba en llamas cuando me acosté, y vos también estabas verde... Estamos cerca de la revolución y cual Adela en el carrousell, yo rezo por vos. La vanguardia es así, it's only love, it's say no more.
martes, 21 de diciembre de 2010
viernes, 3 de diciembre de 2010
No te alejes tanto de mí
Después de esperar tanto, después de extrañarte desde aquel 9 de Octubre, después de que la entrada me pedía a gritos ser estrenada, llegó Diciembre, llegó Spinetta.
Tres cuadras de gente esperando para ver algo "privado"... ¡Tenías que ser vos, Flaquito! Y sentarme en la barra de un Niceto ya muy oscuro y transpirado, para volver a verte esos ojitos de papel, que volvió a no tener precio. Porque entrás con una idea en mente, pero cuando te escucho paranoiquearme con "Dame un futuro, en el que yo pueda hamacarme y ver las estrellas brillar... ♪" No se sabe jamás, ni cuándo ni cómo termina la función. Fuiste corto, corto y sencillo. No volviste cuando te lo pedimos, no repartiste sonrisas ni autógrafos, fuiste amigo de los homenajes y las presentaciones, fuiste vos, como siempre.
Me dejaste sola, llegando las 22:30, en cualquier calle de Palermo, tomando algo con cuatro extraños que no sabían lo mucho que te extrañaba. La luna me iluminaba tus pasos, al igual que aquella vez. Y hoy, puedo prometerte que el 22 te voy a ir a buscar, para despedirme de todo lo que pasó y conocer todo lo que pasará. Porque yo sé que prontito tendré tus huellas en Un Mañana.
Tres cuadras de gente esperando para ver algo "privado"... ¡Tenías que ser vos, Flaquito! Y sentarme en la barra de un Niceto ya muy oscuro y transpirado, para volver a verte esos ojitos de papel, que volvió a no tener precio. Porque entrás con una idea en mente, pero cuando te escucho paranoiquearme con "Dame un futuro, en el que yo pueda hamacarme y ver las estrellas brillar... ♪" No se sabe jamás, ni cuándo ni cómo termina la función. Fuiste corto, corto y sencillo. No volviste cuando te lo pedimos, no repartiste sonrisas ni autógrafos, fuiste amigo de los homenajes y las presentaciones, fuiste vos, como siempre.
Me dejaste sola, llegando las 22:30, en cualquier calle de Palermo, tomando algo con cuatro extraños que no sabían lo mucho que te extrañaba. La luna me iluminaba tus pasos, al igual que aquella vez. Y hoy, puedo prometerte que el 22 te voy a ir a buscar, para despedirme de todo lo que pasó y conocer todo lo que pasará. Porque yo sé que prontito tendré tus huellas en Un Mañana.
Algo está pasando hoy
es que te quiero tanto amor
ya nada está cerrado
luce como el mundo.
Me estaba preguntando
me estaba preguntando
estaba simplemente así, super bien.
Y ellos se estaban oxidando
y yo estaba por creer en vos.
No te alejes tanto
no te alejes tanto de mí.
Me estaba preguntando
y estaba alimentando
y estaba alucinando bien, super super,
y es que estaba satinado
y estaba por pensar en vos, en vos.
Estaba yo pensando
que era balanceado
y estabas acercándote,
nena vos acercándote.
Pero no, vos venías por alta
yo estaba satinado
me estabas recorriendo al fin,
nena al fin, ¡sí!.
No te alejes tanto de mí...
es que te quiero tanto amor
ya nada está cerrado
luce como el mundo.
Me estaba preguntando
me estaba preguntando
estaba simplemente así, super bien.
Y ellos se estaban oxidando
y yo estaba por creer en vos.
No te alejes tanto
no te alejes tanto de mí.
Me estaba preguntando
y estaba alimentando
y estaba alucinando bien, super super,
y es que estaba satinado
y estaba por pensar en vos, en vos.
Estaba yo pensando
que era balanceado
y estabas acercándote,
nena vos acercándote.
Pero no, vos venías por alta
yo estaba satinado
me estabas recorriendo al fin,
nena al fin, ¡sí!.
No te alejes tanto de mí...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)